• El consumo de gas natural en hogares, comercios e industrias registra la máxima cifra desde 2012
• Los almacenamientos subterráneos y las plantas de regasificación, claves para hacer frente al incremento de demanda provocado por la ola de frío
La demanda nacional de gas natural alcanzó ayer, 18 de enero, los 1.502,1 GWh, debido al efecto de la ola de frío. Este dato supera a la máxima cifra de 2016, que registró 1.445 GWh el pasado 14 de diciembre, y supone un récord desde febrero de 2012.
En concreto, la demanda convencional de gas natural, destinada a los consumos de hogares, comercios e industrias, alcanzó los 1.229,2 GWh, lo que representa el cuarto mayor valor histórico registrado, sólo superado por los consumos de los días 3, 8 y 13 de febrero de 2012.
Las entregas de gas natural para la generación de electricidad registraron los 272,9 GWh, lo que pone de manifiesto el papel fundamental que el gas natural desempeña para garantizar el suministro eléctrico, en un contexto, además, de baja hidraulicidad.
En una situación de ola de frío como la actual está siendo clave el papel de los almacenamientos subterráneos y de las plantas de regasificación para la seguridad de suministro. Los almacenamientos subterráneos han sido la primera herramienta de flexibilidad utilizada para hacer frente a la demanda.
Las plantas de regasificación también están aportando flexibilidad ya que, en un escenario de mayor demanda y de menores importaciones de Argelia, están permitiendo recibir gas natural licuado de otros orígenes.
El récord de demanda de gas natural alcanzado ayer se superó atendiendo con normalidad toda la demanda del Sistema.
La Agencia Estatal de Meteorología mantiene en sus previsiones bajas temperaturas para los próximos días en diferentes puntos de la geografía española, por lo que podrían batirse nuevos récords.